El rozamiento (la fuerza horizontal que hace el asfalto sobre la rueda) máximo es proporcional a la carga normal que soporta. Un coche como los nuestros lleva digamos un reparto estático de cargas adelante-atrás de 55 a 45% del peso del coche. Cuando se acelera, se transfiere carga del eje delantero al trasero. Cuando se hacen maniobras de frenado, la proporción se descompensa más a favor de la delantera. Luego en maniobras desesperadas siempre se tendrá un rozamiento al menos un 22% mayor adelante que atrás. ¿De dónde se va a ir entonces antes? Ya no quedan muchas posibilidades de que sea delante.
La suspensión influye poco siempre que esté en condiciones. Otra cosa es que lleves el amortiguador agarrotado o el muelle flojo y que las ruedas no consigan tocar el suelo. Rueda que no toca suelo ni frena, ni acelera, ni direcciona, ni nada de nada.
Yo enseño a mis niños que lo importante en estas cosas no son los qués, sino los por qués.
Otro día hablamos de la facilidad de controlar y del aquaplanning, que me muero de sueño.