Estos días que hay un poco de niebla se observan perfectamente los conocimientos tan justos que comenta navio de un porcentaje muy alto de conductores. Mucha gente no sabe algo tan básico como que cuando tienes un coche detrás hay que apagar el antiniebla trasero de igual forma que se quitan las largas cuando hay un vehículo delante. Pues bien, muchísima gente enciende el antiniebla y lo deja fijo durante todo el trayecto con lo que provocan frenazos en autovías y colisiones por alcance al confundirse estas luces con las de freno. Y esto sin hablar de las molestias que el uso inadecuado de este alumbrado provoca.
Pues bien, si se cambia la forma de examinarse o incluso se ponen exámenes para renovar (con sus correspondientes cursos de reciclaje si son necesarios) todos estos problemas se evitarían, al menos en un porcentaje elevado.