La caja de arranque le pasa un valor de temperatura muy bajo (en mi caso, ayudado por el PolarFIS, me marca -59ºC) y puede hacer que el sensor de temperatura haga creer al coche que es tan baja la temperatura que es peligroso para el arranque.
El resto del día, como la temperatura que tiene el sensor es más o menos la temperatura ambiente, al "restarle" X grados la caja no llega a dar ese problema.