Este es el resultado de haber estado unos cuantos añitos jugando con los pisitos, las casitas y sus precios. Los "ganadores" del jueguecito, que estarán disfrutando de sus plusvalías (dinero que ahora le toca poner a la UE para tapar los agujeros generados y que vamos a estar décadas devolviendoles entre todos con sangre, sudor y lágrimas), y presumiendo de lo bien que lo han hecho y de su buen olfato para los negocios, deben estar muy orgullosos de la gesta conseguida.

Pero ya sabeis, el que se queja es porque ha perdido en el juego así que a apechugar

Suerte para lo que viene.