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Hoy os venimos a hablar de una pieza muy importante del coche, las gomas de las puertas, las responsables de que no sintáis molestos ruidos o vibraciones de puertas y ventanillas. Una correcta limpieza y tratamiento de estas alargan notablemente su vida, disminuyendo los molestos sonidos y vibraciones (quien lo haya sufrido lo entenderá)
Para tratarlas correctamente son necesarios dos productos: Un limpiador potente (PneuClean) y un acondicionador (Sisbrill Car).
A continuación os explicamos el proceso para conseguir los mejores resultados:
Comenzaremos aplicando el limpiador sobre todas las gomas, podemos facilitar el proceso pulverizando sobre una microfibra directamente (usar guantes por precaución) y frotando. Lo dejamos actuar unos minutos y aclaramos con agua (una microfibra mojada podría valer).
Solo con esta etapa ya evitaremos una gran cantidad de ruidos molestos ocasionadas muchas veces por polvillo, arena y suciedad que generan fricción durante la vibración.
Una vez esté la superficie limpia, habremos eliminado la suciedad de los "poros de la goma" y preparado la superficie para que el acondicionador tenga la mejor adherencia posible.
Aplicando un acondicionador como Sisbrill Car mejoramos la lubricidad de las gomas, y más importante aún, evitamos su agrietamiento. Una nota curiosa aquí es que muchas personas usan aquí equivocadamente el término "hidratar", cuando realmente están "acondicionando" la superficie, mejorando su estética, lubricidad y protección.
Tras aplicarlo obtendremos los resultados siguientes:
De esta forma conseguiremos una mayor duración y eliminar muchos de los crujidos que en los coches con más edad aparecen.
Un saludo y gracias
Pablo López
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