Puedes dar toda la guerra que quieras, pero las sentencias en los tribunales dejan claro que la garantía de los servicios oficiales sólo se aplica a coches que hayan pasado la revisión en servicios oficiales o en talleres autorizados, es decir, talleres en regla que pagan sus impuestos. Si lo has hecho tú por tu cuenta, no hay garantía que valga a no ser que puedas demostrar que el daño causado es debido a un fallo de fabricación o a la mala acción del concesionario. Para eso hay que peritar el coche y presentar pruebas concluyentes, lo cual en la mayoría de los casos es prácticamente imposible de conseguir.
De todos modos, en este caso es posible que accedieran a extender la garantía tras la reprogramación, pero de nuevo tendrías que volver a pasar las revisiones en el concesionario hasta que la garantía expirara.