Coches diesel como ese, de hace 14 años, son responsables de la acumulación de partículas en suspensión que destrozan el aire de nuestras ciudades. Es una máquina de enviar carbonilla al ambiente, carbonilla que va a nuestros pulmones y que ha causado la muerte estimada de miles de personas en los últimos años. Los nuevos vehículos diesel tienen sistemas antipolución, incluidos los Dacia, que filtran esas partículas para que no lleguen a nuestros pulmones. Estos son hechos científicos que difícilmente nadie puede discutir.
Probablemente te da igual, pero a mí me parece muy razonable que este tipo de vehículos tengan su circulación restringida. Por lo menos en el centro de las ciudades.