El vampiro se despertó después del largo viaje por la autopista...Y se asustó del paraje tenebroso.
Comenzó su búsqueda de nuevas víctimas. Estaba realmente hambriento; el viaje desde Wolfsburg había hecho mella en él.
Sobretodo después de la reunión con la vampiresa Sheila, que también estaba hambrienta, se agachó y le propuso lo siguiente:
Te he soñado durante muchos siglos y ahora que te veo, estás para hincar el diente....